INGREDIENTES:
- 200 g de quinoa
- 2 pechugas de pollo sin piel, huesos ni grasa
- Para la salsa de limón:
- 5 cucharadas de zumo de limón
- 2 cucharadas de vinagre de vino blanco
- 2 sobrecitos de stevia
- 5 cucharadas de agua
- Media cucharadita de harina de avena (opcional)
ELABORACIÓN:
· Prepara la salsa.
Mezcla los ingredientes de la salsa de limón en un cuenco grande.
· Macera el pollo.
Corta la pechuga de pollo en filetes, salpimenta y métela en el cuenco con la salsa de limón para que macere, durante dos o tres horas.
· Prepara la quinoa.
Prepara la quinoa Lávala bajo el chorro de agua fría durante 2-3 minutos o hasta que el agua salga limpia y escurrirla bien. Calienta una cucharada de aceite de oliva en una cazuela, agrega la quinoa y cocina unos minutos a fuego medio, hasta que esté doradita y remueve bien para que no se queme. Agrega agua, sal, jengibre en polvo y pimienta negra, mezcla bien y deja que hierva. Cocina durante 15-20 minutos, hasta que la quinoa esté tierna. Retira del fuego y reserva.
· Haz el pollo.
Saca el pollo del caldo y reserva ese caldo. Cocina el pollo en una sartén bien caliente. Cuando esté doradito, echa la mitad de la salsa por encima, añade una cucharada sopera de harina de avena (opcional) y remueve mientras llevamos a ebullición. Cocina unos minutos hasta que el pollo esté hecho. Retira el pollo, y en la misma sartén, pon la quinoa con el resto del caldito.
· ¡Emplata y disfruta!
Sirve la quinoa en un plato, y pon el pollo por encima. Decora con cebollino fresco picado.