Después de alterar nuestros ritmos de comida, podemos sentir que nuestro cuerpo reacciona de forma diferente. Sentir síntomas que normalmente no tenemos o notar cambios que no nos gustan.
En las navidades tomamos muchos alimentos dulces, grasas, excesos de calorías y alcohol. Todo esto en un corto espacio de tiempo, lo que genera en nuestro cuerpo una reacción desagradable. Es debido a la sobrecarga de trabajo a la que sometemos a los riñones e hígado. Provocando además, la inflamación del intestino delgado. A esta situación la llamamos EMPACHO.
Para tratar de aliviar estos síntomas podría ayudarte:
Otros consejos que te pueden ayudar a lidiar con los empachos: